miércoles, 6 de octubre de 2010

HE RECUPERADO LA LIBERTAD.

HE ABANDONADO EL TRATAMIENTO CON INTERFERÓN



Ya he comentado en el blog las terapias alternativas en las que me he volcado para lograr mi recuperación, pero todavía tenía una asignatura pendiente y era tener el valor suficiente para ser consecuente con mi "pensamiento sanador" y confiar únicamente en el poder interior, capaz de regenerar la mielina.
Noesiterapia (Curación por el Pensamiento), Acupuntura, Nutrición, Meditación, Chi-Kung y una vida plena, equilibrada, feliz y armoniosa, son la clave.



Pero mi actitud ante la enfermedad y el tratamiento con interferón, chocaban frontalmente en una incongruente espiral. He pasado 15 meses poniéndome enfermo cíclicamente, por la administración semanal de Avonex. Los efectos secundarios iban desapareciendo al cabo de unos días, y cuando empezaba a olvidarme de ellos, tocaba una nueva dosis que volvía a exacerbar todos mis síntomas, además de provocarme insomnio, fatiga e irritabilidad.


El 2 de octubre, coincidiendo con mi 45 cumpleaños, me hice el mejor regalo: abandonar el tratamiento para dirigir por completo mi proceso curativo, que por cierto, ha evolucionado tan rápida y positivamente, que ya hablo de la EM en pasado.


Esta entrada no la he creado para empujar a las personas con esta enfermedad a que dejen sus tratamientos. Sólo pongo sobre el papel aquéllas cosas que he incorporado y desterrado en mi vida y que me han servido para darle un sentido y para encontrar la paz y la salud.



A Belén y a mis padres, por su comprensión y apoyo.

A Félix, mi neurólogo, por su hacer y su interés personal

Al Doctor Escudero, por sus enseñanzas, impagables con dinero.

A los doctores Ghislaine Lanctot, John Virapen y Teresa Forcades i Vila por su valiente labor divulgativa.

A Enrique, mi acupuntor y maestro, por su generosidad y sabiduría.

A la Escuela Neijing "El Rescate" de Alicante, profesores y compañeros, por mi "rescate".
A Vivi por su Reiki a distancia.

Y muy especialmente, a mis hijos Elena y Pablo, por su cariño.


¡GRACIAS!